COMISIÓN EPISCOPAL PARA LA PASTORAL LITÚRGICA
Ciudad de México, a 27 de julio de 2022.
ASUNTO: Oración por las Instituciones
Gubernamentales y por la conversión de los victimarios.
A TODOS LOS PASTORES Y FIELES DEL PUEBLO DE DIOS
Animados por todos mis hermanos en el episcopado, por la Conferencia de
Superiores Mayores y la Provincia Mexicana de la Compañía de Jesús, durante
estas semanas del mes de julio, con la “Jornada de Oración por la Paz”, se ha
despertado la consciencia de trabajar unidos en un único proyecto, para escribir una
nueva página de la historia de nuestro País, llena de esperanza, de paz y de
reconciliación.
Para este Domingo 31 de julio, la Comisión Episcopal para la Pastoral Litúrgica,
ofrece el siguiente subsidio que tiene como intención general: pedir por las
Instituciones Gubernamentales de nuestro País, para que se realicen mejores
políticas públicas y, por la conversión de los victimarios.
Motivemos a todos los fieles a participar en esta Eucaristía dominical, vestidos de
color blanco como un signo para pedir la paz y el cese de la violencia en nuestra
Nación Mexicana.
Que el Señor, príncipe de la paz, premie los esfuerzos de todos los hombres y
mujeres de buena voluntad con los que juntos construimos la civilización del Amor.
Fraternalmente:
+ Mons. Víctor SÁNCHEZ ESPINOSA
Arzobispo de Puebla de los Ángeles
Presidente de la Comisión Episcopal para la Pastoral Litúrgica
Pbro. Lic. Emanuel VÁZQUEZ CARRILLO
Secretario Ejecutivo CEPALI
COMISIÓN EPISCOPAL PARA LA PASTORAL LITÚRGICA
JORNADA DE ORACIÓN POR LA PAZ
Domingo XVIII del Tiempo Ordinario -31 de julio de 2022
INTENCIÓN GENERAL:
“POR LA CONVERSIÓN DE LOS VICTIMARIOS Y POR LAS INSTITUCIONES GUBERNAMENTALES,
Y POR MEJORES POLÍTICAS PÚBLICAS”.
La eucología y los textos bíblicos serán los correspondientes al XVIII Domingo del Tiempo
Ordinario.
Monición de entrada:
Convocados para la “Jornada Nacional de Oración por la paz en México”, hoy la
culminamos con una doble intención: pidiendo por las Instituciones Gubernamentales de nuestro País, para que se realicen mejores políticas públicas y, por la conversión de los victimarios.
Reconocemos que estamos delante de un problema que necesita de todos y todas
para atenderlo desde la raíz. Por eso es necesario trabajar por mejores políticas
públicas, que demanden la participación de todos, centradas en el encuentro, el
diálogo y la restauración tan urgente del tejido social. Unas políticas públicas que
alcancen una verdadera reconciliación de manera proactiva, formando una nueva
sociedad basada en el servicio a los demás, más que en el deseo de poder (cfr. FT 229).
Ya que la Eucaristía es “escuela de caridad, de unidad y de paz”, vivámosla
plenamente para ser agentes formadores y constructores de una auténtica paz.
Terminada la Profesión de fe, se continúa con la oración de los fieles:
ORACIÓN DE LOS FIELES
El que preside: Oremos a Dios Padre, que dio al mundo la paz por la
venida de su Hijo, nuestro Señor Jesucristo y digamos confiadamente.
R/. Atiende Señor, nuestras súplicas.
Enseguida el diácono o un ministro laico hace desde el ambón u otro lugar conveniente la oración
de los fieles.
1. Por el Papa Francisco, nuestros Obispos y Presbíteros de México, para que
anuncien con valentía que el amor al prójimo es realista y éste no desperdicia
nada que sea necesario para una transformación de la historia que beneficie a
los más vulnerables (cfr. FT n. 165). Oremos.
2. Por quienes nos gobiernan: el Presidente de la República, el Gobernador de
nuestro Estado N._______________ y nuestro Presidente Municipal
N.____________________, principales responsables del orden y la tranquilidad
de todos los ciudadanos, para que rechacen el mal uso del poder, la corrupción,
la falta de respeto a las leyes y la indiferencia (cfr. FT n. 177). Oremos.
3. Por quienes ejercen el Poder Legislativo en nuestro País -Diputados y
Senadores-, para que, junto con el Poder Ejecutivo, trabajen por una sana
política que actúe desde la “caridad social”, con visión amplia, capaz de
reformar las Instituciones, coordinarlas y dotarlas de mejores prácticas, que
permitan superar presiones e inercias viciosas y ayude a pensar en el bien
común (cfr. FT n. 177-178. 180. 192-194. 196). Oremos.
4. Por la conversión de los victimarios, que han perdido el sentido de la caridad
y la fraternidad, para que busquen la “luz de la razón y de la fe”, sean
conscientes de no causar tanto dolor y muerte y recapaciten en sus actos, de tal
modo que mas bien busquen la virtud que les haga entender que sus prójimos
no tengan que padecer la miseria del dolor y de la pobreza (cfr. FT n. 185.186 187).
Oremos.
5. Por cada uno de los bautizados, por los hombres y mujeres de buena
voluntad, para que juntos instauremos la civilización del amor, salvaguardando
la condición y dignidad de la persona humana y unidos en un único proyecto,
escribamos una nueva página de la historia, llena de esperanza, llena de paz y
llena de reconciliación (cfr. FT 183. 188. 231). Oremos.
Se concluye la Oración de los fieles con la Oración por la Paz, como sigue:
El que preside: Concluyamos haciendo juntos la Oración por la Paz:
“Señor Jesús, tú eres nuestra paz, mira nuestra patria
dañada por la violencia y dispersa por el miedo y la
inseguridad.
Consuela el dolor de quienes sufren.
Da acierto a las decisiones de quienes nos gobiernan.
Toca el corazón de quienes olvidan que somos
hermanos y provocan sufrimiento y muerte,
dales el don de la conversión.
Protege a las familias, a nuestros niños, adolescentes
y jóvenes, a nuestros pueblos y comunidades.
Que, como discípulos misioneros tuyos, ciudadanos
responsables, sepamos ser promotores de justicia y
de paz, para que, en ti, nuestro pueblo tenga vida
digna. Amén.
María, Reyna de la paz, ruega por nosotros”.
Terminada la oración, la celebración se desarrolla como de costumbre.
Se sugiere utilizar la Plegaria Eucarística para Diversas Circunstancias I La Iglesia en camino
hacia la unidad (…para que tu pueblo brille, en este mundo dividido por las discordias, como
signo profético de unidad y de paz).
Comments